Los cinco policías que están detenidos por la muerte de un hombre en una estación de servicio de Córdoba fueron pasados a situación pasiva. La resolución fue dictaminada por el Tribunal de Conducta de Fuerzas de Seguridad, mientras se lleva a cabo la investigación sobre la muerte de Guillermo Bustamante.

Se trata del suboficial inspector, Marcos Guzmán Altamirano; el cabo, Juan Martín; y el oficial ayudante, Nicolás Bulacio; quienes se encuentran imputados en calidad de coautores por el delito de homicidio calificado por abuso de sus funciones.

En tanto, el oficial inspector, Walter Perfumo, está acusado de encubrimiento doblemente agravado al no haber denunciado "la perpetración de un delito doblemente agravado por el hecho precedente y por su calidad de funcionario público en concurso ideal y en calidad de autor". Por su parte, el sargento, Mariano Córdoba, es sospechoso de omitir los deberes de funcionario público.

La decisión se basa en la Ley 10.731 de control disciplinario de las fuerzas de seguridad y se conoció gracias a la información proporcionada por la Dirección General de Control y Conducta Policial.

Vale recordar que, en la madrugada del pasado lunes feriado, el conductor y un empleado de la estación de servicio, ubicado en la esquina de las calles Octavio Pinto y Mariano Castex, comenzaron a discutir por la carga de nafta.

Ante el incremento de la agresividad en el establecimiento, se dio aviso a la Policía y un patrullero que pasó por el lugar se detuvo para tratar de controlar la situación, algo que no ocurrió.

Es que, por motivos que todavía se investigan, el hombre falleció en medio del incidente y la esposa, así como también un testigo, señalan que fue responsabilidad de los agentes policiales que lo asfixiaron.