Bryan Singer logra plasmar de una manera adecuada la vida de Freddy Mercury. Lo mas destacable de esto es que en gran parte, gracias al aporte del talento de Rami Malek, donde definitivamente el film se supera dándonos una idea clara de que probablemente estamos frente a una o la mejor actuación de su vida.
Con un cast de figuras que son adecuadas para el film es absoluto que Malek supera con creces las expectativas que teníamos para su persona, acompañan figuras como Mike Myers o Aidan Gillen junto con Lucy Boynton funcionan en la película.
Tanto así como los integrantes de la banda, Ben Hardy, Joseph Mazzello y Gwylim Lee cada uno de ellos es justo y adecuado para el rol que interpretan.
La película se luce con un repertorio de canciones conocidas obviamente. Con una actuación que verdaderamente sorprende de parte de Malek, es lamentable encontrarse con que la película esta editada para mayores de 13 años, por lo que no se llega a ver mucho de lo escabroso de la banda y de la vida de Freddy además que se entiende que el film viene a ser un tributo de la vida de una leyenda.
Mas allá de eso el drama más importante es que al comprenderla como biopic uno puede enterarse de que mucho de lo que incide el film esta edulcorado para llegar a la emotividad del espectador.
Existen hechos que están modificados para llegar al concierto del Live aids y transformarlo en un momento clímax culmine para la banda en el film.
Si hay que ser objetivos, uno de los mejores momentos de la película es justamente ese, el concierto de Live Aids. En parte porque nos brindan un pequeño medley de sus éxitos mas notorios y aun mas, porque uno siente de que esta en el concierto.
Singer eficazmente se hace con unos efectos especiales que te invitan a ser parte de la multitud en el estadio. Y es en las tomas alejadas del lugar donde de pronto se acercan de una manera sorprendente (Muy buen efecto) y es allí, donde uno entiende el trabajo que tiene la película y mas allá de que esta todo suavizado para la gran pantalla, se disfruta por completo y no solo se ve muy bien, sino que entretiene.

Director: Bryan Singer - Anthony McCarten
Fotografia: Newton Thomas Sigel
Musica: John Ottman