El pasado domingo se llevaron a cabo los últimos turnos del cronograma electoral establecido por la Municipalidad de Córdoba, a través de la Dirección de Centros Vecinales de la Secretaría de la Mujer, Géneros, Diversidad y Gestión Vecinal.

El objetivo de cada turno electoral fue fortalecer y revitalizar la democracia en todos los barrios de la ciudad.

Los seis turnos electorales convocaron un total de 68.857 vecinos, destacándose en esta última oportunidad la asistencia de 15.657 votantes.

A través de la ordenanza N° 10.713 y su decreto reglamentario N° 2.653/4, este domingo renovaron sus autoridades 69 centros vecinales, de los cuales 33 tuvieron elecciones y los otros 36 se presentaron con listas únicas.

Al respecto, la secretaria de Géneros, Diversidad y Gestión Vecinal, Sandra Trigo manifestó” Ayer vivimos una fiesta muy importante. La democracia de nuestros barrios ha quedado plasmada en trescientos centros vecinales. a lo largo de seis domingos distintos”.

Además, la secretaria Trigo aprovechó la oportunidad para destacar el compromiso barrial en todas las elecciones: “Nos encontramos con la grata sorpresa de una alta participación en cada uno de los turnos electorales. Todo ha sido muy importante para lograr la transparencia de la democracia participativa. Los distintos procesos electorales fueron coordinados y dirigidos por las juntas electorales vecinales de cada uno de los barrios, desde la Municipalidad a través de nuestra secretaría les pudimos proveer de todas las garantías institucionales que permitan la democracia, que la expresión y que la voluntad de cada uno de las y los vecinos en cada barrio se viese reflejada con total claridad y fundamentalmente en paz”.

Es importante destacar que a lo largo de seis fechas electorales, 306 centros Vecinales de la ciudad renovaron autoridades. De ellos hubo 133 que tuvieron elecciones con multiplicidad de listas, y 173 presentaron listas únicas.

En ese marco, se debe resaltar la participación de todos los centros vecinales que, aun presentándose con listas únicas, comenzaron a encontrar y plantear objetivos en común con respecto a las necesidades de cada uno de sus barrios, unificando criterios y formando una comisión totalmente plural en pos de su distrito.

Además, y más allá de que la ordenanza lo establece, fue muy importante, en las seis fechas electorales,  la participación de las mujeres encabezando listas, lo que demuestra un alto grado de madurez la madurez y responsabilidad por involucrarse, conseguir, y lograr no solo la democracia barrial, sino también la igualdad política en la composición de las listas.