El papá de Cecilia Gisela Basaldúa, la mochilera de 35 años que apareció muerta en un descampado cercano a la localidad cordobesa de Capilla del Monte en abril pasado, luego de estar desparecida 20 días, sostuvo que la investigación presenta “muchas contradicciones” tras seis meses y reclamó que “se investigue”.

Daniel Basaldúa contó a la agencia de noticias Télam que este lunes se hizo una nueva marcha desde el Congreso de la Nación hasta la Casa de Córdoba, en Capital Federal, donde dejaron afiches pegados en las puertas, que estaban cerradas.

“Cuando vayan mañana se van a encontrar con todas las pegatinas”, recalcó Basaldúa a la vez que la fiscal de Instrucción de Cosquín, Paula Kelm, a cargo de la causa “no tiene nada concreto en contra del único detenido (Lucas Bustos)”, señaló.

Basaldúa también consideró que el hombre de apellido Mainardi, quien compartió casa con Cecilia antes de desaparecer, podría estar “involucrado”.

El padre de la víctima, Daniel contó que la única vez que la fiscal Kelm se comunicó con su familia le planteó su “disconformidad” con cómo lleva adelante el caso: “No se apartó de su pensamiento, no fue productiva, ella sigue por el mismo lado”, reclamó el padre de la víctima.