El dirigente Rogério Caboclo fue suspendido de manera definitiva como presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) debido a una denuncia sobre acoso sexual realizada por una empleada de la entidad.

En un principio el dirigente fue suspendido por 30 días, pero ahora la Comisión de Ética del Fútbol Brasileño se pronunció sobre la situación y decidió suspenderlo por 41 meses.

Sin embargo, esta sanción supera el tiempo que le resta de mandato, el cual inició en 2018 y expiraba en 2023.

Según indicó la CBF en un comunicado, la penalidad le prohíbe "participar de cualquier actividad relacionada con el fútbol" durante un total de 41 meses.

En la denuncia de la empresa de la entidad, la mujer dijo que fue "humillada" en reiteradas ocasiones por Caboclo, quien incluso le pidió que escondiera bebidas alcohólicas para poder consumirlas durante el trabajo.

El documento fue presentado por la mujer ante el Comité de Ética de la CBF y la Dirección de Gobernanza y Cumplimiento, y allí detalló lo que el dirigente le habría hecho vivir.

Entre varias de las cosas que denunció la mujer, indicó que el dirigente habría inventado falsos relatos sobre su vida sexual, y contó que en varias ocasiones el hombre estaba alcoholizado.

"He estado pasando por un momento muy difícil en los últimos días. Incluyendo tratamiento médico. De hecho, hoy presenté una queja ante el Comité Ético del Fútbol Brasileño y la Junta de Gobierno y Cumplimiento, para que se puedan tomar medidas administrativas", aseguró la empleada.

Hasta que hayan nuevas elecciones, quien seguirá al mando de la CBF será -de manera interina-, Ednaldo Rodrigues Gomes, antiguo dirigente de la Federación de Fútbol de Bahía. (NA)