El hijo de Yiya Murano subastará las tazas del veneno: "quiero convertir algo siniestro en algo bueno"

Sociedad 07 de septiembre de 2023 Por El Objetivo
Martín Murano señaló que después de recuperar las tazas se le ocurrió la idea de hacer una subasta para "convertir algo macabro, siniestro, en algo bueno. Es muy paradójico porque Yiya odiaba a los animales", resaltó.
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En una de estas tazas tomó el té la primera víctima de Yiya Murano, Nilda Gamba. Foto: gentileza

Martín Murano, hijo de Yiya Murano tiene planeado subastar las tazas con las que su madre envenenó con cianuro a dos amigas y a una prima entre febrero y marzo de 1979.

El hombre señaló que después de recuperar las tazas se le ocurrió la idea de hacer una subasta para "convertir algo macabro, siniestro, en algo bueno. Es muy paradójico porque Yiya odiaba a los animales", resaltó.

De esta manera, y con el dinero recaudado Murano colaborará con el Refugio De Mili González que da techo y comida a más de 50 perros y gatos en Mar del Plata.

Lo curioso de esta historia es que la vajilla volvió a sus manos después de varias décadas: "Se la había regalado a la madre de una amiga mía hace muchos años, pero esa mujer murió hace poco y mi conocida me dijo ´Te voy a mandar algo que es tuyo´".

Sin imaginarse qué podía llegar a ser, cuando el paquete llegó a su casa días después y lo abrió, su mente recordó la historia de su madre: "Vi lo que era y me quería morir".

A pesar de que María de las Mercedes Bolla "Yiya" Aponte de Murano murió en 2014, siempre se supo que no tuvieron buena relación y por este motivo, junto con la historia que había detrás de las tazas, Martín había decidido regalar la vajilla.

En una de esas tazas tomó el té la primera víctima de Yiya Murano, Nilda Gamba. Martín contó en diálogo con TN que ese día la amiga de Yiya había ido a merendar y que se descompuso.

"Es macabro. Con una de esas tazas que tengo acá asesinaron a una persona que yo quería más que si fuera mi tía", expresó.

Este recuerdo le provocó una sensación extraña a Martín por lo que había decidido tirarlas. Sin embargo, un amigo le sugirió que las subaste y done el dinero. (NA)

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