La justicia agravó la imputación contra Fernando Albareda, quien se encuentra detenido como sospechoso del asesinato de su madre, Susana Montoya. A la acusación inicial de “homicidio calificado por el vínculo” se le han sumado los cargos de “homicidio por alevosía y por codicia”.

Susana Montoya fue hallada sin vida en su domicilio del barrio Ampliación Poeta Lugones el 3 de agosto. Las investigaciones y las declaraciones en los medios habían dirigido las sospechas hacia su hijo mayor, Fernando, como presunto autor del crimen.

Tras su detención el 8 de agosto, su hermano Ricardo solicitó formalmente ser querellante en el caso, señalando a Fernando como el principal sospechoso.

La sesión judicial de este viernes se realizó de manera virtual para evitar el traslado de Albareda, quien permanece detenido en la cárcel de Bouwer. El fiscal a cargo, Juan Pablo Klinger, optó por esta modalidad para facilitar el proceso. En su primera declaración como testigo, Fernando Albareda había reportado el hallazgo del cadáver de su madre en el patio de la casa, cerca de un mensaje intimidante escrito en la pared. Ahora, en calidad de imputado, Albareda se limitó a negar su responsabilidad y optó por no ampliar su declaración.