Brenda Micaela Barattini recuperó la libertad luego de casi ocho años detenida en la cárcel de Bouwer. La arquitecta de 34 años había sido condenada el 25 de septiembre de 2019 a 13 años de prisión por el delito de tentativa de homicidio, tras haber seccionado con una tijera de jardín el pene de su amante durante un encuentro íntimo en 2017.

La condena completa se extinguirá en noviembre de 2030, aunque la mujer estaba habilitada para acceder a la libertad condicional a partir del 25 de noviembre de 2026. Sin embargo, quedó en libertad casi un año antes gracias al cómputo de 10 meses y tres días de reducción por la realización de numerosos cursos de capacitación dentro del penal.

El beneficio fue otorgado este martes por el juez de Ejecución Penal Facundo Moyano Centeno, tras una audiencia en Tribunales 2 en la que se verificaron los requisitos legales y se fijaron las condiciones que Barattini deberá cumplir.

Además, pesa sobre ella una restricción perimetral de mil metros respecto de la víctima, a quien no podrá contactar bajo ningún motivo. La medida regirá hasta noviembre de 2030 y cualquier incumplimiento implicará la revocación del beneficio y su regreso a prisión.

El caso que conmocionó a Córdoba estalló la noche del 25 de noviembre de 2017, cuando la víctima logró escapar del departamento de Barattini en Nueva Córdoba pese a haber sufrido una mutilación casi total. Una vecina enfermera ayudó a contener la hemorragia mientras el hombre pedía auxilio en el palier. La acusada intentó inicialmente alegar un abuso, pero la investigación recolectó evidencia clave: la tijera de podar, notas manuscritas, planes y material digital que demostraban la premeditación.

En un principio la fiscal Bettina Croppi elevó la causa a juicio como lesiones gravísimas calificadas. Sin embargo, durante el debate oral la fiscal Laura Battistelli reconfiguró la acusación como tentativa de homicidio, figura por la que Barattini finalmente fue condenada y cuya pena fue ratificada por el Tribunal Superior de Justicia.