El Inter Miami escribió la página más importante de su corta historia al derrotar 3-1 a Vancouver Whitecaps y consagrarse campeón de la MLS por primera vez. El equipo de Javier Mascherano, guiado por un Lionel Messi decisivo con dos asistencias, coronó una temporada récord y se quedó con el título frente a su gente en el Chase Stadium.

Un inicio inesperado y un partido cuesta arriba

El conjunto canadiense había sido un rival complicado para las Garzas: de los tres duelos previos entre ambos, Miami había perdido dos. Sin embargo, esta vez el guion cambió temprano. A los 8 minutos, un veloz contragolpe terminó en un autogol del colombiano Édier Ocampo, el cuarto en una final de MLS y el más rápido en la historia del certamen.

Vancouver reaccionó en la segunda parte. Ali Ahmed empató a los 60 minutos y los visitantes estuvieron muy cerca de la remontada, pero el poste frustró su mejor oportunidad. Cuando el Whitecaps dominaba, apareció Messi para cambiar el rumbo: robó una pelota en campo rival y asistió a Rodrigo De Paul, quien marcó el 2-1 a los 71’. En tiempo agregado, Tadeo Allende liquidó el encuentro y desató la fiesta en Fort Lauderdale.

Una temporada de récords

La campaña del Inter Miami quedará registrada como una de las más productivas en la historia de la MLS. El equipo anotó 101 goles entre fase regular y playoffs, la mayor cifra para un club en una sola temporada. Además, superó el histórico registro del LA Galaxy al convertir 20 goles en playoffs, otro récord.

Messi, por su parte, alcanzó el título número 44 de su carrera y el tercero con Inter Miami, tras la Leagues Cup 2023 y el Supporters’ Shield 2024 (obtenido con un récord de 74 puntos). El capitán suma ahora 77 goles y 53 asistencias en 88 partidos con el conjunto rosa y negro.

El duelo también marcó el último partido profesional de Jordi Alba y Sergio Busquets, quienes se despidieron levantando una nueva copa junto a Messi, como en tantos otros capítulos de su carrera.

Mascherano, campeón en su primer año

Javier Mascherano se convirtió en uno de los 13 técnicos en llegar a una final de MLS y lo hizo coronándose campeón en su debut al mando de un club. “Fueron 11 meses de muchísimo trabajo. Tuvimos momentos buenos y malos. Esto es todo de los jugadores. Se nos escapó la Concachampions y la Leagues Cup, pero esta no se nos podía escapar”, declaró emocionado a Apple TV.

Sobre la despedida de Alba y Busquets, agregó: “Qué mejor que irse así. Sus carreras no merecían otra cosa. Han sido tocados por una varita mágica”.

Un cierre con show y una figura en la tribuna
El inicio del partido se retrasó unos minutos debido al show musical previo, fiel al estilo estadounidense. Entre los miles de aficionados presentes destacó la presencia de Mauricio Pochettino, seleccionador de Estados Unidos.

Messi, otra vez en lo más alto

La coronación tuvo su momento culminante cuando Lionel Messi, como capitán, levantó la MLS Cup tras recibir una dedicatoria del comisionado Dan Garber: “Es un honor haberte tenido en esta liga”. El argentino sonrió, alzó el trofeo junto a David Beckham y los hermanos Mas y luego lo compartió con todo el plantel.

Inter Miami, que alguna vez fue un proyecto incierto, cerró así su temporada más brillante, guiado por un Messi estelar y con un título que marca el comienzo de una nueva era en la MLS.