Apenas se conoció la decisión nacional de suspender las clases hasta el 31 de marzo próximo, el intendente de Córdoba, Martín Llaryora, dispuso una medida similar en el ámbito local. En consonancia con el anuncio que el presidente Alberto Fernández realizó desde la residencia de Olivos, la ciudad de Córdoba verá paralizada la actividad escolar en todos los establecimientos que de la Municipalidad dependen.

En pos de mitigar la propagación del virus Covid-19, los establecimientos escolares de todo el país retomarían actividad el 1 de abril próximo; la misma situación atravesarán entonces las escuelas y jardines de infantes municipales.

La decisión política del Palacio 6 de Julio se da en el marco de otras medidas de prevención tomadas en pos del combate al coronavirus, declarado pandemia por la Organización Mundial de la Salud.