Lasso asume este lunes la presidencia de Ecuador
El conservador Guillermo Lasso asumirá este lunes la presidencia de Ecuador tras vencer al correísmo y recuperar el poder para la derecha, con una ceremonia de investidura que se desarrollará en la ciudad de Quito, y a la que asistirán mandatarios y líderes políticos de Sudamérica y España.
Este exbanquero de 65 años hereda un país en crisis económica, que se extendió a lo social y sanitario a causa del coronavirus, siendo Ecuador el séptimo de Latinoamérica con más casos -más de 418.000- y muertos -más de 20.100-.
Al acto de posesión a cargo de la unicameral Asamblea Nacional asistirán gobernantes de varios países como el de Brasil, Jair Bolsonaro; de Colombia, Iván Duque; y de Chile, Sebastián Piñera.También estará el rey de España, Felipe VI, de acuerdo con la secretaría de Comunicación.
El Gobierno argentino está representado por una comitiva encabezada por el canciller Felipe Solá, quien dará a Lasso una carta del presidente Alberto Fernández, en la que el mandatario renovó sus "mejores deseos" para la gestión que se inicia.
Alianzas
Como antesala, el último domingo se celebró en Quito un foro iberoamericano derechista organizado por la Fundación Internacional para la Libertad (FIL), encabezada por el premio Nobel Mario Vargas Llosa y en el que participaron Lasso y sus "amigos" José María Aznar, exgobernante de España, y Andrés Pastrana, de Colombia.
En el cónclave, al que también asistió el dirigente opositor venezolano Leopoldo López, se debatió sobre los desafíos de la libertad en momentos en que el Gobierno de Colombia enfrenta un estallido social y en Chile resurge la izquierda y retroceden los partidos tradicionales antes de la redacción de una nueva Constitución.
En un mensaje grabado, Duque celebró que haya en Ecuador, con el presidente Guillermo Lasso, "a un nuevo aliado como jefe de Estado para continuar defendiendo unidos la democracia en la región".
En el balotaje del 11 de abril pasado, el exbanquero tomó revancha ante el exmandatario socialista Rafael Correa (2007-2017) al derrotar a su delfín, el economista Andrés Arauz, por 4,72 puntos.
Tras una década de inestabilidad institucional (1997-2007), en la que Ecuador tuvo siete presidentes -tres de ellos derrocados- y de la era correísta, Lasso es el primer derechista en ser electo.
Crisis económica y sanitaria
La gran expectativa está puesta en cómo saldrá Lasso de la doble crisis económica y sanitaria que atraviesa el país, para lo que el exbanquero ya dio algunas señales con la designación de su ministro de Economía y sus contactos con los organismos de créditos internacionales en Washington.
Lasso apostó por el ingeniero y economista quiteño Simón Cueva. "El actual ministro ha visitado los organismos multilaterales, como el Banco Mundial, Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y Fondo Monetario Internacional (FMI). Y en esas reuniones le fue bastante bien", informó el propio mandatario al diario El Comercio, aunque no dio más detalles de esos encuentros.
Fue representante del FMI en Bolivia entre 1999 y 2006, fue director de estudios del Banco Central del Ecuador entre 1995 y 1999, director en Quito del Think Tank TNK Economics y consultor para diversas instituciones como el Banco Mundial, la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Comunidad Andina (CAN). No es casualidad la incorporación de Cueva al gabinete.
Ecuador recibió de estas instituciones más de 7.500 millones de dólares en créditos durante 2020, y se esperan otros 2.500 millones a lo largo de 2021 y 2022. Y ahora el Banco Mundial considera que el Gobierno de Lasso necesitará reformas estructurales adicionales, incluida una mejora en las metas fiscales y la captación de inversión, como móvil para la recuperación.
Promesas de campaña
Según proyecciones del Banco Mundial en su informe "Volver a crecer", la balanza fiscal del país se mantendrá en cifras negativas hasta 2022, mientras que la deuda pública, que actualmente equivale al 62,52% del PBI, seguirá aumentando en 2021, si el país se mantiene dentro de los canales establecidos por el acuerdo firmado durante el Gobierno saliente de Lenín Moreno.
Con ese corsé, Lasso tiene cuatro años para cumplir con las promesas económicas más relevantes de su campaña: crear 2 millones de empleos, elevar el salario mínimo de 400 a 500 dólares, duplicar la producción petrolera, reducir la tasa de interés e impuestos, como el aplicado a salida de divisas, pese a que es el tercero que más recauda.
La vía para cristalizar su plan es una reforma tributaria, que en líneas generales plantea ampliar la base de contribuyentes y cuyo texto presentará en la Asamblea Legislativa mañana, luego de jurar en el cargo.
"Creemos en una economía libre, emprendedora y de oportunidades para todos", es la consigna sobre la que se apoya todo su programa económico.
Acuerdo con Rusia
Cueva, días antes de su nombramiento como ministro, fue incorporado al equipo de transición presidencial como miembro del Comité para la Vacunación, otro dato clave en la agenda de Lasso, ya que dijo entender que "la vacunación no es solo un proyecto sanitario o social, es el principal programa económico".
En este punto, activó desde el 11 de abril pasado una serie de reuniones con embajadores de Rusia, China, Estados Unidos, la Unión Europea y el presidente de Chile, con el fin de obtener dosis contra la Covid-19.
"Vamos a firmar un acuerdo de provisión de vacunas Sputnik V con Rusia para fortalecer nuestro plan. Agradecemos a las autoridades rusas."
"La vacunación es prioridad. Vamos a firmar un acuerdo de provisión de vacunas Sputnik V con Rusia para fortalecer nuestro plan. Agradecemos a las autoridades rusas por su disposición y apertura. Este es un gran encuentro por la salud y la reactivación del Ecuador", tuiteó la semana pasada Lasso.
Para esta travesía eligió a Ximena Garzón como ministra de Salud, doctora quiteña con un doctorado en Salud Pública enfocado en Salud Ocupacional y posdoctorado en Investigación de Salud Ocupacional y Epidemiología.
"Los objetivos del nuevo ministerio serán primero cumplir con el compromiso de nueve millones de personas vacunadas en los 100 primeros días de Gobierno, que la gente sea atendida con calidad, que pueda ir a los hospitales y si requiere ser internada, se los atienda. Siempre fue mi vocación. Nunca tuve otra intención en la vida sino ser médica", sostuvo Garzón en un video tuiteado por Lasso.
En paralelo, Lasso nombró como canciller al diplomático Mauricio Montalvo, quien estuvo al frente de la embajada ecuatoriana en Australia hasta el 10 de mayo pasado, y que desde mañana dirigirá 44 embajadas, 36 consulados y cinco representaciones permanentes.
Alianza del Pacífico
En la mira hay dos objetivos centrales: la incorporación de Ecuador a la Alianza del Pacífico -que quedó claro en abril pasado en Colombia, cuando Lasso realizó su primer viaje como presidente electo y pidió al presidente Iván Duque el "ingreso inmediato" al bloque- y un tratado con México, que según el actual ministro de Producción y Comercio Exterior está en proceso.
Además, Lasso estableció entre las prioridades de su futuro Gobierno la lucha contra el hambre y la desnutrición infantil, tareas que le encargó a la exasambleísta afroecuatoriana Mae Montaño, quien se desempeñará como la nueva ministra de Inclusión Económica y Social, mientras que el empresario y ejecutivo inmobiliario Darío Herrera estará al frente de la cartera de Desarrollo Urbano y Vivienda, con la meta de entregar 200.000 viviendas gratuitas a campesinos.
Con una amplia nominación de mujeres en el gabinete, Lasso hizo énfasis en promesas de "femicidios cero", meta que pretende alcanzar con la abogada Bernarda Ordóñez, quien estará al frente de la secretaría de Derechos Humanos y cuya principal tarea será la lucha contra la violencia de género.
En tanto, María Brown, ex funcionaria de Unesco en Ecuador, será ministra de Educación y se centrará en las escuelas interculturales bilingües para indígenas, mientras que Alejandro Ribadeneira a cargo de la Secretaría de Educación Superior, Ciencia Tecnología e Innovación, buscará transformar esa entidad que Lasso en campaña había ofrecido suprimir alegando que impide el libre ingreso a las universidades.