La licencia de paternidad, una asignatura pendiente en América Latina
A nivel mundial, cada vez son más los hombres que comienzan a dar prioridad a sus hijos sobre el trabajo. Sin embargo, los padres latinoamericanos pasan muy poco tiempo con su hijos o hijas al momento de su nacimiento. En algunos países de la región, incluso, hay una ausencia total de permisos pagos de paternidad garantizados por la ley, como es el caso de Costa Rica, Cuba y Honduras.
Según los datos de la empresa de recursos humanos Globalization Partners, Paraguay y Venezuela son los Estados cuya legislación prevé el tiempo más largo de descanso posnatal para los padres de recién nacidos. Ambas naciones estipulan una licencia de paternidad de dos semanas posteriores al parto, con goce de sueldo a cargo del empleador. Uruguay se ubica segundo en la lista, con 13 días de licencia paternal para los trabajadores del sector privado.
Los padres peruanos, en tanto, tienen derecho a solicitar diez días consecutivos cuando nacen sus hijos, mientras que en Colombia este periodo de baja laboral es de ocho días hábiles. En Argentina, Guatemala y República Dominicana la licencia de paternidad es de apenas dos días. La falta de garantías legales amplias sobre los permisos de paternidad no solo desincentiva la participación de los hombres en el cuidado de los hijos, sino que también dificulta la empleabilidad de las mujeres en el mercado laboral.