Con los grupos ya definidos, el Mundial 2026 empieza a tomar forma y los analistas futboleros ya imaginan los caminos posibles hacia la gran final. Entre favoritos, revelaciones y clásicos imperdibles, aparecen tres escenarios bien distintos que podrían definir el próximo campeón del mundo.

El escenario lógico: Argentina–Francia, la trilogía que quiere el mundo

Si uno mira jerarquías, actualidad y profundidad de planteles, hay dos selecciones que asoman por encima del resto: Argentina y Francia. El sorteo permitió que ambas esquiven cruces peligrosos en la fase inicial, y su recorrido natural podría volver a enfrentarlas en una final que sería histórica.

Argentina, con una base consolidada y una generación que mezcla experiencia con recambio, llegaría como candidata firme tras superar a potencias como Alemania y Brasil. Del otro lado, Francia volvería a apoyarse en un plantel largo, repleto de variantes, para dejar en el camino a selecciones de peso como España o Portugal.

Sería la tercera parte de una rivalidad que ya marcó una época: octavos en 2018, final en 2022 y, quizá, una definición mano a mano en 2026. Un duelo que el planeta futbolero no dudaría en llamar “la trilogía del siglo”.

El escenario sorpresivo: Brasil–Senegal, el Mundial abre su mapa

El fútbol mundial está viviendo un cambio de era. Hoy, cualquiera le gana a cualquiera, y selecciones que antes parecían menores ahora compiten de igual a igual. En ese contexto, un escenario alternativo muestra una final tan inesperada como fascinante: Brasil vs. Senegal.

En esta proyección, Japón pisa fuerte desde la fase de grupos, Marruecos vuelve a ser protagonista como en 2022 y Senegal da el golpe grande eliminando a Francia en octavos. Con una estructura sólida, potencia física y jugadores de elite en Europa, los africanos llegarían a la final por primera vez en la historia.

Brasil, mientras tanto, viviría un Mundial al estilo clásico: firme, ordenado y aprovechando su jerarquía individual para resolver partidos complicados. Un mano a mano con Senegal sería un choque entre tradición y revolución, el peso de la historia contra el equipo que puede cambiarla.

El escenario futbolero y picante: Argentina–España, una final inédita

El tercer camino propone lo que el hincha disfrutará desde las emociones más primarias: clásicos, cruces calientes y un recorrido cargado de historia. En este escenario, Argentina y España aparecen como finalistas después de superar rivales pesados en todas las fases.

Argentina tendría que cruzarse con Italia, Uruguay e Inglaterra en un camino vibrante, lleno de condimentos. España, en tanto, sobreviviría a una llave brava dejando atrás a Alemania, Países Bajos y Francia.

La final entre argentinos y españoles sería un choque de estilos: la posesión y el juego combinativo frente a la intensidad sudamericana y el golpe final en los momentos justos. Además, sería la primera vez que ambos se enfrenten en una definición mundialista, un escenario tan nuevo como atractivo.

Un Mundial impredecible

El Mundial 2026 amplió el número de equipos y multiplicó las posibilidades. Habrá más cruces, más sorpresas y más espacio para que aparezcan nuevas potencias. Entre lo lógico, lo inesperado y lo futbolero, los tres caminos muestran el mismo mensaje: ya no alcanza con la camiseta; hay que jugarlo todo.