El dólar oficial -sin los impuestos- cotizó a $976,67 para la compra y a $1.034,98 para la venta. En el Banco Nación, el billete se ofreció a $986,50 para la compra y a $1.026,50 para la venta.
En ese marco, las reservas brutas internacionales treparon US$ 350 millones hasta los US$ 30.845 millones.
La redujo de 40% a 35%, lo cual repercutirá en los rendimientos de los plazos fijos.
La medida se enmarca en la política de desregulación y normalización de la actividad financiera llevada adelante por el Gobierno Nacional, en particular eliminando restricciones al financiamiento en moneda extranjera.
Desde las 22 ya frenaron todos los procesos productivos referentes a la fabricación de billetes.
Fue la tercera jornada consecutiva con una compra neta superior a los US$ 100 millones.
En tanto, en el segmento financiero, casi no hubo cambios por lo que el Contado Con Liquidación cerró en $ 1.229, y el MEP a $ 1.209.
La entidad criticó las publicaciones de los supuestos traslados en camiones de caudales y precisó que el nivel de reservas en oro suman aproximadamente 4.981 millones de dólares.
Los bancos han comenzado a ajustar al alza las tasas de interés ofrecidas por los plazos fijos minoristas.
El BCRA volvió a vender fuerte en el último día de julio. Caputo dice que en septiembre termina el calvario.
La entidad monetaria terminó con un saldo negativo de $105 millones de dólares del mercado cambiario.
Los dólares financieros también cotizaron a la baja y quedaron en la zona de los $1.300