La Cámara Federal de Casación Penal sentenció este jueves que el ataque contra la embajada de Israel en marzo de 1992 y la bomba que hizo explotar la sede de la AMIA el 18 de julio de 1994 “respondieron a un designio político y estratégico” de la República Islámica de Irán.
Los ataques dejaron más de 600 fallecidos en Israel, mientras que autoridades palestinas, el enclave costero palestino gobernado por Hamas, informaron ya superaron los 400 muertos por bombardeos israelíes.
En el marco de la causa por las supuestas actividades vinculadas al terrorismo de un grupo de iraníes y venezolanos, la Justicia dictó la falta de mérito y autorizó la salida del país a cinco personas.
Así lo afirmó durante el tradicional acto para recordar a las 85 víctimas fatales y más de 300 heridos del ataque terrorista a su sede, al cumplirse mañana 26 años de aquel 18 de julio de 1994.
Ilan Sztulman aseguró que el grupo terrorista "tiene la capacidad y la infraestructura para hacerlo. Especialmente con el apoyo logístico de Venezuela".