El hecho ocurrió en Montevideo, Uruguay cuando una empresaria, una de las primeras personas afectadas por el Coronavirus en su país, reveló un detalle escalofriante que hizo a su caso generar preocupación en toda la comunidad.

Si bien su caso no es de gravedad y ella se encuentra en aislamiento y cumpliendo con el reposo correspondiente, su situación se convirtió en un fenómeno mundial por el riesgo de contagio: luego de volver de Europa asistió a un casamiento donde estuvieron también otras 500 personas.

Carmela, una mujer de 57 años se enteró que tenía Coronavirus en la tarde del día 13 de marzo. Al enterarse y según contó, se sintió muy enojada porque pidió que le hicieran análisis tras su regreso y no le dieron importancia. En enero estuvo en Milán y tuvo fiebre, volvió a Montevideo y luego viajó a Madrid donde tuvo tratamiento médico debido a un mal estado de salud.

"El 22 de febrero viajé a Madrid con destino a Milán y no pude ingresar y el 6 de marzo volví. Pregunté en el aeropuerto si por venir de Europa había alguna medida y me dijeron que no. Ese día almorcé con mi mamá de 84 años y a la noche fui a un casamiento con 500 personas”, informó.

El problema no radica únicamente en las personas que asistieron al casamiento sino que una de ellas es un asistente de un equipo deportivo y, tras acusar también presentar síntomas de Coronavirus, todos los deportistas están siendo sometidos a análisis.

Actualmente, están pidiendo a todos los que asistieron que se comuniquen con las autoridades y soliciten la cuarentena. Además, por el momento son 20 los casos sospechosos de la totalidad de los invitados.