El reconocido infectólogo Hugo Pizzi dijo que volver a la cuarentena estricta en la zona del AMBA y en el Chaco es una "decisión correcta” y "heroica" al tiempo que reconoció que el sector de la salud “ya lo veía venir”.

En este sentido, remarcó que el diagnóstico epidemiológico en estas zonas y en el resto del país son completamente distintas. “Es como si fueran dos países diferentes”, consideró.

“Evidentemente hubo muchos tropiezos. Cuando veíamos e insistíamos que hacía falta distanciamiento social y veíamos esa aglomeración cabeza a cabeza en los trenes, ya lo veíamos venir”, señaló a Cadena 3.

De lo contrario, según afirmó, “estaríamos como Chile, con los pasillos y camillas llenos de gente”. “Es una decisión dura, pero peor sería el resultado”, aseguró con vehemencia.

"En Buenos Aires son dos millones de personas que se mueven, lo que es propicio para el virus. Los barrios vulnerables tienen una densidad poblacional que hacen casi imposible el distanciamiento social”, afirmó.

Respecto a quienes se manifestaron en contra de las extensiones de la cuarentena, destacó que "hay un gran grupo de gente que no ha interpretado la gravedad de esta situación”. "Siempre va a haber problemas, ahora por lo menos van a hacer un aporte solo a las zonas afectadas. No tenemos vacuna, no tenemos nada. Agradezcamos que la mortalidad no es tan alta como en otros países”.

Sobre Chaco, Pizzi dijo que es un problema “político” más que “epidemiológico”. “Los problemas con los aborígenes, las zonas sin agua, la desnutrición, la epidemia de cólera de hace varios años y impacto del dengue más grande del país”, enumeró y siguió: “Son cosas muy extrañas las que suceden en Chaco”.

Remarcó, finalmente, el rol de “médicos heroicos que están perdiendo la vida para tratar de solucionar un problema político que arrastra a la salud”.