Un empleado judicial es investigado por la organización de una fiesta clandestina en la ciudad de Córdoba, en donde se desarticularon nueve de eventos de este tipo en la noche de Año Nuevo.

Según confirmaron fuentes judiciales a NA, la investigación penal por la organización de una fiesta clandestina privada supuestamente por parte de un empleado del Ministerio Público Fiscal de Córdoba está a cargo de la Unidad Fiscal de Emergencia Sanitaria (UFES).

La Fiscalía trata de establecer si existió violación, por parte del empleado, de las medidas de seguridad sanitarias dispuestas por las autoridades públicas para evitar la propagación del Covid-19.

La convocatoria era para pasada la medianoche de este jueves a una fiesta a realizarse en una quinta ubicada en Ricardo Rojas al 8.000.

En la invitación al evento el sospechoso solicitaba que cada invitado llevara botellas de champagne con un vaso o copa y aclaraba que no iba a cobrar entrada, sino que se pasaría la gorra para pagarle al DJ.

En tanto, y según confirmaron las fuentes, la Unidad Fiscal de Atención Inmediata (UFAI) realizó la comunicación formal para la iniciación del sumario administrativo que pudiera corresponderle a dicho empleado.

Este viernes a la madrugada, y según confirmó a Cadena 3 el titular de Espectáculos Públicos del municipio de la ciudad capital, Julio Suárez, se desarticularon nueve fiestas clandestinas. "Fue una noche con mucha actividad no autorizada. Detectamos nueve fiestas clandestinas en distintos puntos de la ciudad", indicó el funcionario.

Los barrios en los que se realizaron los eventos fueron Patricios, Alberdi, Marqués, la zona de Padre Claret, Argüello, Villa Belgrano y Centro.  Además, el funcionario comentó que "seguramente" hubo otras fiestas clandestinas en la capital provincial "porque el movimiento fue importante".