El ministro de Relaciones Exteriores, Felipe Solá, bloqueó en las últimas horas a la "compañera" Alicia Castro, quien había criticado en los últimos tiempos la política internacional del gobierno de Alberto Fernández.

"El canciller me bloqueó. Amazing ("sorprendente", en inglés). Qué extraordinaria diplomacia tiene el gobierno", opinó Alicia Castro, quien otrora se desempeñó como embajadora en Venezuela y Reino Unido.

Entre otras cosas, Castro viene reclamando que la Argentina se retire del Grupo de Lima, que reúne a gobiernos de derecha y centro derecha de la región. La tensión llegó a su punto máximo en octubre, cuando la referente renunció a la embajada de Rusia por la postura crítica que mantiene Fernández respecto al gobierno bolivariano de Venezuela.

Ahora, Castro volvió a la carga, y puso en evidencia que dentro de la alianza gubernamental existen algunas distancias.

Eso no necesariamente conduce a la ruptura, pero es un dato indispensable para interpretar el derrotero zigzagueante que parece tener desde el punto de vista ideológico el gobierno de Fernández.

El incidente tuitero sirvió, por otro lado, para que germinen operaciones mediáticas contra uno u otro de los protagonistas. Los enemigos de Solá, por ejemplo, vaticinaron que dejará su cargo, en tanto que los antagonistas de Castro la acusaron de "agente de Venezuela".

Fuente: NA