"Hubo la misma cantidad de suicidados después de la guerra que muertos en el combate, y se debió a la ausencia de un equipo de profesionales atendiendo al excombatiente".

Esa frase, tan cruda y absoluta, corresponde al brigadier Eduardo La Torre, piloto de la aeronave Pucará durante la guerra de Malvinas, en la charla que tuvo con El Objetivo por el Aniversario 40 del conflicto.

"La posguerra va muy de la mano de la asistencia que uno recibe y del entorno con que uno se rodea", agregó Eduardo antes de detallar las dificultades por las que debieron pasar los veteranos al volver de Malvinas.

"Se hizo muy difícil, sobre todo en la década de los 90´. Quienes volvimos de la guerra no encontrábamos lugares para trabajar ni tampoco había facilidades en general", declaró sobre la discriminación a la que fueron sometidos muchos excombatientes.

A su vez, Eduardo dejó en claro que esta cuestión no es cosa del pasado sino que es algo con lo que los sobrevivientes continúan lidiando: "Hasta el dia de hoy hay una deuda pendiente en general por parte de la sociedad, de un reconocimiento explícito a los soldados que están llevando a gran pesar y duras penas el posguerra. Al que entrega todo al que reconocerle todo".

"El efecto que se produce cuando uno es asistido de forma inmediata es diferente. No puede no haber una gerencia dedicada a la contención de las victimas. Cuando esa asistencia llega tarde, llega con el efecto dañino provocado. Si llega tarde no tiene el efecto de revertir la situación", sostuvo acerca de la importancia vital que significa que la asistencia llegue en tiempo y forma, algo que lamentablemente no sucedió.

"Se lo trató de ocultar al hombre que quedó con problemas", fue otra de las fuertes frases del Brigadier, y a la hora de abordar las razones por las cuales se dio dicha situación Eduardo sostuvo: "Yo lo atributyo a la falta de experiencia belica. Estamos hablando que las personas que más sufrieron eran las personas de menor edad que atravesaron una vida con dificultades importantes".

"Los veteranos de Malvinas somos una raza en extinción. Todos tenemos 60 años para adelante. En ese proceso reflexivo miramos hacia adentro y hacia afuera. Nunca es tarde pensar que hay cosas por hacer", agregó el Brigadier con una mirada optimista.

"Con mis 63 años tengo la esperanza de despertar con que recuperamos la soberania de las islas y termine el colonialismo. Espero conocer al caciller o presidente que reclame con justicia la sobreranía de las islas", concluyó manifestando una vez más el deseo de recuperar las Malvinas en memoria de todos los caídos, antes y después de la guerra.