Habrá vuelos jueves y viernes, tras dictarse conciliación obligatoria en el conflicto de pilotos
El Ministerio de Producción y Trabajo dictó hoy la conciliación obligatoria por 15 días en el conflicto con los gremios de pilotos, que habían convocado a un paro de 48 horas a partir de mañana y que quedó suspendido tras acatar la medida.
La conciliación regirá desde este jueves hasta el 28 de este mes, plazo en el que se abrirá un proceso de negociación entre los sindicatos Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y Unión de Aviadores de Líneas Aéreas (UALA) y el Gobierno, que ya tiene confirmado un primer encuentro para el próximo lunes.
En ese marco, las partes deberán intentar resolver el conflicto en trono a las diferencias en torno a la política aerocomercial que sigue el oficialismo.
Los sindicatos de pilotos habían anunciado la huelga este martes en rechazo a una reciente medida de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC) que permite a las compañías aéreas que operan en la Argentina contratar pilotos extranjeros.
De inmediato, la ANAC solicitó a Trabajo que dictara la conciliación, lo cual se concretó este miércoles, aunque durante horas continuó la incertidumbre sobre si se levantaba el paro ya que los sindicatos no habían oficializado si aceptaban la medida.
Hasta que cerca de las 18:30 el titular del gremio UALA, Cristian Erhardt, confirmó en declaraciones al canal C5N que su gremio y APLA acataban la conciliación, tras una reunión de los sindicatos del sector.
Luego, APLA difundió un comunicado en el que señaló que acataron la medida de Trabajo, "más allá de entender que dicho acto administrativo no resulta aplicable, ya que ha sido utilizado con anterioridad para el mismo conflicto vinculado a la actual política aerocomercial".
En el mismo texto, el gremio que lidera Pablo Biró advirtió que, de acuerdo a la ley, con el dictado de la conciliación "se deben retrotraer los efectos de las decisiones que dieron motivo al conflicto", por lo que la nueva medida de la ANAC sobre pilotos extranjeros "también ha quedado en suspenso".
"Esperamos que en la audiencia convocada para el próxmo 17 de diciembre los responsables del área abandonen su soberbia e intransigencia para finalmente entablar un diálogo maduro y responsable", finalizó APLA.
Por su parte, durante la jornada el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, cuestionó con dureza la medida de fuerza que anunciaron los gremios por el cambio de una normativa laboral, la cual -indicó- "beneficia a los pilotos argentinos que volaban afuera y están volviendo" para trabajar ahora en el país.
En cambio, para los sindicatos, las nuevas regulaciones benefician a la "extranjerización de la mano de obra", lo que ocasionará que "muchos pilotos argentinos pierdan sus empleos".
En declaraciones a radio La Red, Dietrich aseguró que la normativa de la ANAC para pilotos extranjeros "es para simplificar la llegada de gente que tiene la licencia para volar, para que el trámite sea más sencillo y menos engorroso".
El funcionario dijo que si se comparan las nóminas de pilotos de 2015 y la de 2018, a la fecha hay "cien pilotos argentinos más" trabajando en el país, en un escenario en el que hay más compañías aéreas operando.
"Lo que hay en la Argentina hay una ley de hace cincuenta años que dice que pueden venir instructores a trabajar al país durante dos años. El kirchnerismo los trajo cuando compró los Embraer para Aerolíneas y a nadie le preocupó", dijo Dietrich.
Explicó que esos instructores vienen a la Argentina a capacitar a pilotos, que a su vez se terminan convirtiendo en instructores y luego pueden volar los aviones de las empresas que llegan al país.
"¿Cuál es la discusión? Hoy hay 1.776 pilotos trabajando en aerolíneas que vuelan en la Argentina. ¿Cuántos instructores hay? Hay 28. La nueva normativa es para simplificar la llegada de gente que tiene la licencia para volar aviones que aquí no había", aseguró Dietrich.
Además de la cuestión de la contratación de pilotos extranjeros, persiste también el conflicto salarial con los gremios aeronáuticos, ya que la semana pasada fracasó una reunión que Aerolíneas Argentinas mantuvo con los sindicatos debido a que la compañía estatal pretendía analizar el caso de los 376 empleados suspendidos mientras que los gremialistas pusieron como condición anular esas sanciones.