Este jueves 9 de enero se desarrolló la cuarta jornada del juicio que conmueve a Córdoba y al país, por las muertes de cinco bebés en el Hospital Neonatal. La audiencia, realizada en los Tribunales provinciales, estuvo marcada por la declaración de la médica Claudia Elizabeth Ringelheim, especialista en obstetricia, quien ofreció un relato detallado de los hechos y defendió la calidad de la institución.

Un juicio que expone responsabilidades y dolor

El proceso judicial busca esclarecer las responsabilidades en los trágicos eventos ocurridos en la unidad neonatal en 2022. Durante la primera jornada, se leyeron las acusaciones formales y los alegatos iniciales, extendiéndose por más de seis horas, lo que reflejó la complejidad del caso.

En su declaración, Ringelheim aportó información sobre una reunión realizada el 7 de abril de 2022 en el hospital, asegurando que no se discutieron los sucesos trágicos en ese momento. "Se hablaba de cómo mejorar la atención a madres y niños, pero no se abordaron estos temas hasta después", explicó.

Relato sobre el colapso del hospital

Uno de los momentos más destacados de la jornada fue el relato de Ringelheim sobre los hechos del 7 de junio de 2022. Según explicó, fue contactada por la jefa de Guardia, Patricia Pereyra, quien le pidió gestionar derivaciones debido a la saturación del hospital. La médica recordó con pesar que ese día le informaron sobre la muerte de dos bebés y el estado crítico de otros dos.

Ringelheim continuó relatando que, al llegar al hospital esa mañana, se enteró de las denuncias realizadas por la doctora Liliana Asís y el médico Escudero Salama.  “Era algo inexplicable, no podíamos creerlo. Nos enfrentamos a una situación que nunca habíamos imaginado”, relató, refiriéndose a las reuniones posteriores en las que se revisó la línea de tiempo de los casos.

Defensa al hospital y su trayectoria profesional

En su testimonio, Ringelheim defendió el prestigio del Hospital Materno Neonatal y el compromiso de sus colegas: "Es un hospital de excelencia. Tengo 39 años de experiencia profesional y nunca viví algo similar". También destacó que su rol en el hospital era de consultora de alto riesgo, por lo que no tuvo contacto directo con los padres ni con los niños afectados.

Sobre la principal acusada, la enfermera Brenda Agüero, la médica aseguró: "No la conocía antes de este juicio; la vi por primera vez en el juzgado".