Un motociclista de 19 años circulaba correctamente por la avenida y chocó contra un auto que dobló en U al intentar esquivarlo, por el impacto está en grave estado y, tras el hecho, el conductor se escapó, aunque luego se entregó a la Policía de Carlos Paz, en Córdoba.

Se trata de Franco Barrera, quien protagonizó el choque en la avenida Cárcano al 1.100, este jueves por la madrugada.

Un Peugeot 206 gris, que estaba estacionado sobre la vereda en dirección al sur de Punilla, realizó una maniobra en “U” para incorporarse al tránsito y, en ese instante, fue impactado en su lateral izquierdo por una moto Honda Wave, conducida por Barrera.

Por otro lado, según las imágenes que se muestran de las cámaras de seguridad de la zona, el joven circulaba correctamente por la avenida y no logró esquivar al auto que realizó una acción indebida.

Tras el fuerte impacto, el motociclista quedó tendido sobre el asfalto, inconsciente y con múltiples heridas. Por su parte, el conductor del Peugeot huyó del lugar de los hechos sin prestarle asistencia a la víctima.

Franco Barrera fue rápidamente asistido por personal médico y trasladado inicialmente al Hospital Sayago de Carlos Paz. Sin embargo, debido a la gravedad de sus lesiones, fue derivado a la Clínica La Cañada en la ciudad de Córdoba, donde permanece internado en terapia intensiva y su estado de salud es calificado como “muy delicado” y “crítico”.

Según medios locales, las heridas que sufrió son: fractura de fémur, fracturas en el rostro, afectando el tabique y los pómulos y costillas rotas, una de las cuales perforó uno de sus pulmones.

El conductor del Peugeot 206, un hombre de 40 años, se presentó voluntariamente horas después del siniestro, en la Unidad Judicial, acompañado por su abogado. Allí, fue formalmente notificado de su imputación por “lesiones graves por fuga”.

Tras el episodio, la Fiscalía dispuso que el imputado siga el proceso judicial en libertad bajo fianza. Esta decisión generó una fuerte reacción en la madre de Franco, quien con indignación declaró: “Le pintaron los dedos y lo largaron. Lo dejó tirado como un perro y se fue”.

Por el momento, la causa continúa en marcha bajo la dirección de la fiscalía de turno y se están llevando a cabo peritajes, revisión exhaustiva de cámaras de seguridad y toma de testimonios con el objetivo de incorporar nuevas pruebas al expediente. (NA)