Si miramos Córdoba desde arriba veremos que el 20 por ciento de la ciudad brilla bajo este novedoso sistema integrado a la Red de Alumbrado Público. 

Según publica la Municipalidad, "cada adaptación de los puntos de luz requiere una inversión de 17.000 pesos que se prorratean a largo plazo. En consumo la ciudad ahorra entre un 30 y un 50 por ciento. Además, las lámparas LED tienen una vida útil cinco veces mayor a las tradicionales de vapor de sodio".

 Las luces LED ahorran entre un 30 y un 50 por ciento de energía.

Entre otros beneficios tienen mayor eficiencia lumínica y un menor impacto ambiental. Se encienden rápidamente sin necesidad de calentamiento y el daño que reciben es progresivo, por lo que se puede cambiar la lámpara a tiempo sin sufrir un inesperado corte de luz. En síntesis: mayor iluminación de las calles y plazas, con un producto más duradero, a un costo de consumo menor y mínimo daño al medio ambiente.

Así, la Municipalidad se compromete a cumplir con el séptimo objetivo de la Agenda de Desarrollo Sostenible 2030 que busca garantizar el acceso a energía asequible, segura, sostenible y moderna para todos. Utilizar los recursos sabiamente, esa es la fórmula para crear una sociedad sustentable.