La Municipalidad de Córdoba llevó a cabo la clausura del polirubro que había generado gran expectativa por sus "precios bajos" y atrajo a una multitud en la intersección de la avenida Cruz Roja y Rogelio Nores Martínez, en la zona sur de la ciudad. El establecimiento, que ofrecía una amplia variedad de productos como ropa, calzado y artículos de bazar, fue clausurado por no contar con la habilitación correspondiente.

La apertura del comercio generó largas filas de clientes que esperaban ansiosos desde el día anterior para ingresar y aprovechar las supuestas ofertas. Sin embargo, algunos clientes denunciaron la falta de medidas de seguridad y discrepancias entre los precios anunciados y los que se pagaban en la caja.

A raíz de la gran cantidad de gente que había en el lugar, que generó disturbios, empujones, y el reclamo de vecinos de los alrededores por falta de higiene en las veredas y de baños previstos para las personas que desde la madrugada del viernes aguardaban la apertura; la Guardia Urbana Municipal se apersonó a sistematizar el ingreso.

Desde el área de Fiscalización y Control tomaron conocimiento de la situación,  que no había sido notificada al municipio, por lo que inspectores de control de la vía pública ordenaron los alrededores y del CPC Jardín corroboraron la habilitación del local.

En el mismo, los encargados del comercio presentaron el documento de pre-factibilidad, que no acredita la habilitación del local, por lo que se procedió a la clausura del mismo.

La Policía Municipal de Tránsito intervino en la zona, realizando un corte provisorio de la calle De la Industria entre Valparaíso y Nores Martínez y el desvío de las líneas de colectivos  para mejorar la fluidez.

La clausura del local se llevó a cabo debido a diversas irregularidades y además no contar con la habilitación para funcionar. A pesar de las expectativas iniciales, la jornada terminó con la presencia de seis móviles policiales que instaron a los clientes a retirarse del lugar.