La localidad de Brinkmann, en Córdoba, sigue en shock tras el asesinato de Aralí Vivas, de 8 años, cuyo cuerpo fue hallado en una vivienda incendiada. Nuevas revelaciones profundizan la tragedia, ya que el fiscal Oscar Gieco informó que los hermanos de Aralí permanecieron con el cuerpo de la niña durante horas, sin saber que estaba sin vida.

Cámaras de seguridad captaron a los menores en la casa entre las 00.24 y las 03.27 horas, un periodo en el que quedaron sin supervisión. La hermana de Aralí intentó despertarla, creyendo que simplemente estaba dormida, hasta que la dejó descansar, sin comprender la situación.

El fiscal expresó su profunda consternación por el abandono en el que quedaron los pequeños: “Quedaron a la buena de Dios, sin madre ni padre”. La comunidad, impactada por los hechos, pide justicia y esclarecimiento de lo sucedido, mientras la investigación continúa avanzando con las declaraciones de testigos y la revisión de evidencias.

Lesiones compatibles con abuso sexual

El fiscal Gieco confirmó que Aralí presentaba un fuerte traumatismo de cráneo que le provocó la muerte, además de lesiones compatibles con abuso sexual. Tres personas se encuentran detenidas: el padrastro de Aralí, un amigo del padrastro y la madre de la niña, imputada por omisión de cuidado y abandono.