Los nuevos aviones de la Fuerza Aérea operarán en el aeropuerto, que readecuó su pista y renovó el sistema de balizamiento.
El acuerdo se compone de 24 aeronaves por 338 millones de dólares, así como un paquete de armas de 212 millones de dólares que incluye AIM-9 Sidewinders y AIM-120 AMRAAM.
Detrás de la urgente y publicitada decisión del Departamento de Estado norteamericano de aprobar la transferencia de cazas F-16 Fighting Falcon de segunda mano se esconde el temor por un gran acuerdo militar en ciernes con China.