Biden prometió enfrentar el "autoritarismo" de China y Rusia y anunció el fin del apoyo a Arabia
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, prometió hoy “contrarrestar” el autoritarismo de China y Rusia, consideró que debe terminar la guerra en Yemen, por lo que dejará de apoyar a Arabia Saudita, y reclamó a los militares de Myanmar que ocuparon el gobierno que “renuncien al poder” y liberen a los activistas y funcionarios detenidos.
Además, el mandatario adelantó su intención de multiplicar por ocho el número de refugiados que pueden ser admitidos en Estados Unidos desde el mínimo histórico que había impuesto Trump.
Respecto de Yemen, juzgó que la guerra "debe acabar", por lo que retirará el respaldo de Washington a la ofensiva de Arabia Saudita contra los rebeldes hutíes y suspenderá la venta de armas.
Quizás lo más impactante de las declaraciones del mandatario fueron las relacionadas a China y Rusia, los dos gigantes con los que el país rivaliza hace años.
Estados Unidos debe "estar ahí frente al avance del autoritarismo, en particular las crecientes ambiciones de China y el deseo de Rusia de debilitar nuestra democracia", afirmó, y fue aún más allá al reseñar que en su conversación telefónica con su par Vladimir Putin habló de la cuestión: "le dejé claro, de una manera muy diferente a mi antecesor, que la época en que Estados Unidos se sometió a los actos agresivos de Rusia se acabó".
Además, instó a los militares de Myanmar a "renunciar al poder" que ocuparon esta semana por la fuerza, y los exhortó a liberar a los dirigentes y activistas detenidos tras el golpe, entre ellos la Premio Nobel de la Paz Aung San Suu Kyi. (Télam)