Este jueves, la única iglesia católica de la Franja de Gaza fue alcanzada por un bombardeo israelí que dejó al menos tres muertos y nueve personas heridas, entre ellas el sacerdote argentino Gabriel Romanelli, párroco de la Iglesia de la Sagrada Familia.

El ataque ocurrió en el norte del enclave palestino, donde se encuentra el edificio religioso. El Patriarcado Latino de Jerusalén confirmó los daños a la estructura del templo y la gravedad del hecho. “La Iglesia de la Sagrada Familia en Gaza se ha visto golpeada esta mañana por un bombardeo. Hay varios heridos en el lugar, entre ellos el párroco, Gabriel Romanelli. En este momento no hay muertes confirmadas”, informaron en un primer momento.

Horas después, el mismo Patriarcado actualizó la información y confirmó que tres personas perdieron la vida y otras nueve resultaron heridas. “Rezamos por el descanso de sus almas y por el fin de esta guerra salvaje. Nada puede justificar los ataques contra civiles inocentes”, expresaron en un comunicado.

Según la reconstrucción de Cáritas, un tanque israelí habría disparado contra la parroquia latina de la Sagrada Familia, provocando una explosión cerca de la cruz del tejado. Como consecuencia, la metralla y los escombros cayeron sobre el patio, hiriendo a quienes se encontraban allí.

El ejército israelí informó que está “analizando lo ocurrido” y aún no brindó una explicación oficial sobre el hecho.