La Legislatura reconoció a Juan Alberto Mateyko

En un emotivo acto, este jueves a la tarde la Legislatura de Córdoba entregó un reconocimiento al conductor, locutor y productor Juan Alberto Mateyko, figura emblemática de la radio y la televisión argentina, “por su destacada trayectoria artística y profesional, su valioso aporte a la difusión de la cultura popular y su profundo vínculo con la provincia de Córdoba”.
El proyecto de resolución fue impulsado por las legisladoras Nancy Almada y Graciela Bisotto, y contó con el acompañamiento unánime de todos los miembros de la Unicameral cordobesa.
El acto se realizó en el Salón de Actividades Legislativas y contó con la presencia de los legisladores Federico Alesandri, Mariano Lorenzo y Juan Pablo Peirone, y las legisladoras Patricia Botta, Inés Contrera y Ariela Szpanin.
Mateyko agradeció la distinción de la Unicameral y dijo que se siente “muy feliz” en Córdoba, ciudad en la que reside desde 2008. Luego confesó: “Quiero decir algo: mi vida siempre fue 95 por ciento remo, pasión y trabajo, y 5 por ciento talento”.
Respecto del programa “La movida de la noche” que conduce en Radio Mitre Córdoba, admitió: “Cuando me ofrecieron un espacio nocturno en la radio no estaba muy convencido. Pero hoy estoy profundamente enamorado del horario de las 22 a las 24”.
Acompañaron a Mateyko su hija, Rosita, y el jefe de Programación de Mitre Córdoba, Edgardo Moreno, quien agradeció a la Legislatura en nombre de toda la emisora por “este reconocimiento justo y atinado” a un conductor “que apostó por Córdoba”.
Durante el acto, Mateyko contó anécdotas graciosas de su vida; sus inicios en la profesión; particularidades de los programas radiales y televisivos que hizo; sus vínculos con figuras como Mirtha Legrand, José Luis “el Puma” Rodríguez, Ramón “Palito” Ortega y Julio Iglesias; su relación de amistad con la familia del extitular de la Agencia Córdoba Turismo, Carlos Alesandri; y su decisión de venir a vivir a Córdoba, entre otros temas.
En tanto, Almada le agradeció a Mateyko por ser “un ejemplo y un faro para las nuevas generaciones”. Luego destacó: “Esto es un homenaje y una celebración de quien dejó una profunda e imborrable huella en la cultura argentina. El verdadero fenómeno de Mateyko es su capacidad de conexión. Su carisma, su simpatía y esa sencillez en su voz producen lo impensado: llegar al corazón del oyente. Con su simpleza y sus valores logra que muchas personas encuentren en su programa un verdadero refugio, una compañía”.

Referente de la comunicación
En sus fundamentos, el proyecto de Almada y Bisotto destaca “la trayectoria” de Mateyko, “referente indiscutido de la comunicación en Argentina, cuya labor ha contribuido de manera significativa al desarrollo y la difusión de la cultura popular y la música nacional”.
Más adelante, la iniciativa manifiesta: “Por su trayectoria ininterrumpida, su compromiso con la difusión de la música y el arte popular, y su fuerte anclaje con la provincia de Córdoba, esta Legislatura considera oportuno rendir homenaje en vida a Juan Alberto Mateyko, reconociendo su aporte a la identidad cultural argentina y su ejemplo de profesionalismo y calidez humana”.
Mateyko nació en Buenos Aires el 26 de marzo de 1946 e inició su carrera artística en la década de 1960. Rápidamente se consolidó como una de las voces más reconocidas y queridas del país. Su carisma, profesionalismo y cercanía con el público lo convirtieron en un comunicador de enorme alcance, en radio y televisión.
En el ámbito televisivo, creó y condujo los programas “La movida del verano”, “La movida tropical” y “El clan del aire”, que marcaron una época en los años ’80 y ’90 por su formato innovador y su contribución a la difusión de artistas populares.
En el plano radial, Mateyko mantuvo una presencia constante durante más de seis décadas y condujo programas en emisoras nacionales y provinciales.
Como quedó dicho, desde la Capital provincial hoy conduce el programa “La movida de la noche” por Radio Mitre Córdoba, espacio desde el cual sigue promoviendo la música argentina y el talento federal.
Su identificación con Córdoba no se limita sólo al ámbito profesional. También participó de múltiples actividades culturales, eventos solidarios y festivales. Su célebre frase “Digo, de pronto, me parece…” se transformó en una marca registrada y símbolo de su estilo inconfundible.
A lo largo de su carrera recibió numerosos reconocimientos y premios, entre ellos varios Martín Fierro (incluido el de oro), que avalan su jerarquía profesional y su aporte a la comunicación y la cultura popular.

















