El grupo terrorista se adjudicó el tiroteo en el Crocus City Hall que ya dejó al menos 143 muertos y más de 150 heridos. Tras acusar a Ucrania, Vladimir Putin prometió que todos los responsables serán “castigados”.
El bombardeo con una nave no tripulada ocurrió en la provincia de Nangahar, en Afganistán. El vocero del Ejército estadounidense dijo que sólo un individuo falleció en el ataque y que no se registraron víctimas civiles.
El atacante había sido liberado el año pasado después de haber cumplido una pena por delitos de extremismo, lo que llevó al primer ministro británico a pedir penas más severas para delitos de “terrorismo”.
Lo hizo al verse acorralado por una operación militar, que habría sido ejecutada en el norte de Siria, aprobada por el presidente Donald Trump. Junto con el jefe del grupo terrorista murieron dos de sus esposas.
Los ataques contra iglesias y hoteles de lujo causaron la muerte de más de 310 personas el domingo.