La jueza dio por “parcialmente clausurada” la investigación y mandó a juicio a Fernando Sabag Montiel, Brenda Uliarte y Gabriel Carrizo, los tres únicos detenidos que tiene la causa.
Es en la causa que tiene tres detenidos por el atentado del pasado 1° de septiembre contra la Vicepresidenta, que insiste con otras medidas de prueba en la investigación con algunas vinculaciones a la oposición y al financiamiento del hecho.
La jueza María Eugenia Capuchetti desestimó el pedido del fiscal Carlos Rívolo. El mismo buscaba "preservar su seguridad".
La vicepresidenta, por su parte, insiste con investigar a los autores ideológicos y saber quiénes financiaron a la organización.
La pista se investiga en un legajo reservado a partir del testimonio de un asesor del Frente de Todos en la Cámara de Diputados, quien aseguró haber escuchado que el legislador hacía referencia al intento de magnicidio a la Vicepresidenta antes de que ocurriera y que "cuando la maten" iba a estar "camino a la costa".
Los procedimientos ordenados por la Justicia se realizaron en inmuebles vinculados a dos personas que quedaron bajo sospecha a partir de distintas conversaciones de whatsapp que mantuvieron con Nicolás Gabriel Carrizo.
El señalado como presunto jefe de la organización detrás del ataque a la Vicepresidenta, acusado además de esconder prueba incriminatoria, continuará con prisión preventiva.
Aseguró que no tenía nada que ver con el intento de magnicidio y que sólo le había seguido la corriente a Uliarte, a la que creía una fabuladora.
La novia del hombre que le gatilló a la vicepresidenta pretendía volver a atacarla. Así se revela en uno de los mensajes que intercambió con el jefe de la "banda de los copitos" tras el fallido atentado.
El expresidente aseguró que entró en un estado de “shock” con la noticia, pero criticó “el grotesco de la sobreactuación” del Gobierno.
La jueza María Eugenia Capuchetti le negó pedido a Nicolás Carrizo, que declaró el viernes y negó haber planificado el ataque contra la vicepresidenta Cristina Kirchner.
Declaró ante la jueza federal, María Eugenia Capuchetti y el fiscal federal, Carlos Rívolo el cuarto detenido en la causa por la tentativa de homicidio en perjuicio de la vicepresidenta de la Nación.