El foco fue contenido tras varios días de actividad. Estaba activo desde el domingo y actualmente se encuentra en guardia de cenizas, destacaron las autoridades provinciales.
La situación se agravó con el cambio de la dirección del viento, con ráfagas de hasta 35 km/h, que puso en peligro el sector conocido como Buda de Traslasierra.
Debido al cambio del recorrido de los vientos y pese a que en un inicio no había riesgos para viviendas, varias familias del paraje Buda debieron dejar sus hogares.