Antártida caliente: Colonias de pingüinos se redujeron más del 75% en 50 años
El pasado jueves 6 de febrero la temperatura en la región alcanzó los 18,3 grados centígrados (base Esperanza). Según el Servicio Meteorológico se trata de la más elevada desde 1961 y supera el anterior récord de 17,5 °C del 24 de marzo de 2015.
Esta semana científicos de Greenpeace a bordo del barco Esperanza estudiaron las colonias de pingüinos de barbijo y constataron reducciones drásticas en muchas colonias, algunas disminuyeron hasta en un 77% desde su último “censo” hace casi 50 años (de 122,550 parejas reproductoras estimadas hoy solo quedan 52,786).
La Isla Elefante es el hogar de una de las poblaciones de pingüinos de barbijo más grandes del mundo, aunque solo fue inspeccionada ornitológicamente una vez (en 1971) por una expedición de los Servicios Conjuntos británicos.
Greenpeace se asoció con investigadores de pingüinos de la Universidad Stony Brook y la Universidad Northeastern para estudiar el impacto del cambio climático en las frágiles colonias de pingüinos de barbijo en la Antártida.
Frida Bengtsson, de la campaña Protege los océanos de Greenpeace, declaró: “Un mundo con menos pingüinos es un lugar menos feliz. A medida que la vida silvestre lucha, necesitamos urgentemente santuarios libres de actividad humana dañina no solo en la Antártida, sino en todos los océanos del mundo, para que la vida marina como los pingüinos tenga el espacio para recuperarse de la actividad humana y adaptarse a nuestro clima rápidamente cambiante. Para hacer eso, es imperativo que los gobiernos acuerden un Tratado Global de los Océanos este año“.
El viaje de Greenpeace a la Antártida es la última parada de la Expedición de Polo a Polo con el objetivo de resaltar las amenazas que enfrentan los océanos.